“Hygge” es una palabra danesa que encarna una sensación de comodidad y bienestar y en tiempos recientes, la estética hygge ha conquistado corazones en todo el mundo gracias a su capacidad para ayudarnos a relajarnos, reducir el estrés y mejorar nuestro ánimo.
¿Cómo es una decoración Hygge?
En el centro de la estética hygge reside la creación de un ambiente acogedor y agradable a través de elementos sencillos y cotidianos. Sus fundamentos incluyen:
1. Iluminación suave
La iluminación suave es esencial para lograr la atmósfera acogedora y relajante de la estética hygge en tu hogar. Al utilizar luz tenue, puedes crear un ambiente íntimo que invita al descanso y la calma. Aquí hay algunas opciones para incorporar la iluminación suave:
- Velas: Las velas son un elemento clásico de la estética hygge. Puedes colocar velas en diferentes áreas de tu hogar para crear un brillo suave y natural. Opta por velas perfumadas para añadir una dimensión adicional de confort.
- Lámparas de mesa: Las lámparas de mesa con bombillas de baja potencia proporcionan una luz suave y difusa que es perfecta para crear un ambiente hygge. Ubica estas lámparas en mesas de noche, mesas auxiliares o en cualquier lugar donde desees una iluminación relajante.
- Lámparas de pie: Las lámparas de pie con pantallas que difunden la luz de manera uniforme son ideales para iluminar toda una habitación con suavidad. Colócalas estratégicamente en espacios de lectura o en esquinas acogedoras.
Lograr una iluminación suave no solo se trata de la elección de las fuentes de luz, sino también de la disposición de estas dentro de tu hogar. Experimenta con la ubicación de las velas o lámparas para crear una atmósfera que se adapte a tus preferencias y necesidades.
2. Colores cálidos
Los colores desempeñan un papel fundamental en la creación de un ambiente hygge. Los tonos cálidos como el rojo, el naranja y el amarillo transmiten una sensación de calidez y confort. Aquí te proporcionamos información adicional sobre cómo incorporar estos colores en tu espacio:
- Paredes: Pintar las paredes con tonos cálidos puede transformar por completo una habitación. Los colores como el terracota, el mostaza y el burdeos son opciones populares para crear una sensación de acogida. Combínalos con tonos neutros para equilibrar la paleta.
- Muebles: Si no deseas hacer cambios drásticos en las paredes, considera incorporar muebles en colores cálidos. Un sofá o una butaca en un tono como el rojo o el ocre pueden ser el punto focal de tu sala de estar y añadirán un toque de calidez.
- Textiles: Los textiles como cortinas, cojines y mantas en colores cálidos pueden ser una manera fácil y económica de introducir esta paleta de colores en tu hogar. Opta por telas suaves y confortables para maximizar la sensación hygge.
La combinación de colores neutros con acentos cálidos crea un equilibrio que evita que el ambiente se sienta abrumador. Experimenta con diferentes tonalidades y texturas para encontrar la combinación perfecta que refleje tu estilo y te haga sentir cómodo en tu espacio.
3. Materiales naturales
Los materiales naturales son fundamentales para infundir autenticidad y calidez en tu hogar siguiendo la estética hygge. La elección de materiales como madera, piedra y algodón aporta un toque de la naturaleza y un ambiente relajado. Aquí tienes más información sobre cómo incorporar estos materiales:
- Madera: La madera es versátil y puede utilizarse en muebles, suelos, techos y accesorios. La madera sin tratar o con acabados naturales es especialmente apreciada en la estética hygge por su belleza rústica.
- Piedra: La piedra, ya sea en forma de encimeras de cocina, detalles decorativos o pisos, agrega una sensación de solidez y conexión con la naturaleza. Puedes optar por piedra natural o imitaciones de calidad.
- Algodón: El algodón es el material perfecto para textiles como sábanas, cortinas y toallas. Su suavidad y transpirabilidad lo hacen muy cómodo y agradable al tacto.
La combinación de estos materiales en tu hogar crea un ambiente que evoca la sencillez y la autenticidad. Puedes mezclarlos en diferentes proporciones según tus preferencias, pero la clave es mantener un aspecto natural y relajado.
4. Texturas suaves
Las texturas suaves son esenciales para crear una sensación de confort y bienestar en un espacio hygge. Al incorporar texturas agradables al tacto como lana, terciopelo y algodón, puedes lograr un ambiente acogedor y relajante. Aquí te explicamos cómo hacerlo:
- Lana: Los textiles de lana, como mantas y alfombras, añaden calidez y suavidad a cualquier habitación. Además, la lana es un material natural que encaja perfectamente en la estética hygge.
- Terciopelo: El terciopelo es lujoso y suave al tacto, lo que lo convierte en una elección popular para cojines, sofás y sillas. Su brillo sutil también agrega un toque de elegancia a la estética hygge.
- Algodón: El algodón es una opción versátil y cómoda para textiles de cama, cortinas y ropa de cama. Su ligereza y transpirabilidad son ideales para un entorno relajante.
Combina estas texturas suaves en tu decoración para crear un ambiente acogedor y placentero. La variedad de texturas agrega profundidad y dimensiones a tu espacio, haciéndolo aún más atractivo para relajarte y disfrutar de tu hogar.
5. Arte y objetos decorativos
El arte y los objetos decorativos desempeñan un papel importante en la creación de un ambiente acogedor y personal en la estética hygge. Aquí hay más detalles sobre cómo utilizar arte y objetos decorativos:
- Cuadros y fotografías: Coloca cuadros y fotografías que te traigan buenos recuerdos o te conecten con experiencias felices. Estas imágenes personales infunden un sentido de calma y satisfacción en tu hogar.
- Plantas: Las plantas no solo aportan frescura y un toque de naturaleza, sino que también pueden mejorar la calidad del aire. Las plantas en macetas y flores frescas son elementos de decoración populares en la estética hygge.
- Velas: Las velas son una forma sencilla de crear un ambiente cálido y acogedor. Además de proporcionar iluminación suave, las velas perfumadas pueden estimular tus sentidos y añadir un toque de romance.
- Cojines: Los cojines son elementos decorativos versátiles que pueden utilizarse para agregar comodidad y estilo a tu espacio. Elige cojines con texturas suaves y colores que se ajusten a tu paleta de colores.
Utiliza el arte y los objetos decorativos para personalizar tu hogar y crear un espacio que refleje tu personalidad y tus experiencias. La combinación de estos elementos contribuye a una sensación de autenticidad y confort en tu entorno.
Además de estos elementos fundamentales, existen consejos adicionales para lograr un ambiente hygge en tu hogar:
- Evoca recuerdos felices: La estética hygge se basa en crear un entorno que te conecte con momentos de felicidad. Coloca fotos de seres queridos, objetos evocadores de buenos momentos o elementos que te hagan sentir cómodo y relajado.
- Crea un espacio para la relajación: Un rincón para la relajación es esencial para la estética hygge, ya sea un sofá, un sillón o un rincón de lectura para disfrutar de tu tiempo libre.
- Invita a tus seres queridos: La estética hygge busca establecer un ambiente cálido y acogedor para compartir con los demás. Invita a tus amigos y familiares a tu casa y disfruta de su compañía.

Ideas de decoración Hygge en cada espacio de tu hogar
Si deseas aplicar la estética hygge en tu hogar, aquí tienes recomendaciones específicas para cada habitación:
En la sala de estar:
- Coloca una manta o cojines suaves en el sofá o sillón para crear un rincón acogedor de relajación.
- Usa velas o lámparas de mesa con luz tenue para crear una atmósfera íntima.
- Añade plantas o flores para un toque de calidez y naturaleza.
- Incorpora fotografías o cuadros de seres queridos para darle un toque personal.
En el dormitorio:
- Emplea colores cálidos y relajantes en las paredes y textiles.
- Agrega textiles suaves como edredones, mantas y cojines para un ambiente acogedor.
- Coloca velas o lámparas de noche con luz suave para una atmósfera relajante.
- Incluye plantas o flores para una conexión con la naturaleza.
En la cocina:
- Utiliza materiales naturales como madera y piedra para crear un ambiente cálido.
- Añade plantas o flores para un toque de frescura.
- Usa velas o lámparas con luz tenue para un ambiente romántico.
En el baño:
- Opta por colores claros y relajantes en las paredes y textiles.
- Añade plantas o flores para conectar con la naturaleza.
- Coloca velas o lámparas con luz tenue para una atmósfera relajante.
La estética hygge es una manera sencilla y efectiva de crear un entorno cálido y acogedor en tu hogar.
Siguiendo estos consejos, puedes establecer un espacio donde relajarte, reducir el estrés y disfrutar de la compañía de tus seres queridos.