¡Bienvenida Milena!…
Los seres humanos fuimos creados en imagen y semejanza de nuestro creador, es decir, estamos diseñados para pensar, sentir y brillar.
En nuestro ADN, estemos o no conscientes de ello, está la solución de todos nuestros problemas, tenemos la capacidad de razonar, de poder tomar decisiones y discernir.
Pero muchas veces estamos tan enfrascados con el problema que olvidamos que fuimos creados para ser 100% felices y brillar en amor y armonía.
Permitimos que las malas situaciones nos controlen, intervenga en nuestro actuar e incluso influyan sobre nuestras decisiones.
¿Quién no ha pasado por una situación desagradable, triste incluso dolorosa? Todos, la diferencia es; que la gente feliz no se engancha, no se auto flagela con el dolor, no se auto sabotea…
Así como tenemos el poder de solucionar nuestros problemas así también lo tenemos para hundirnos y colocarnos un ancla en el cuello.
Claro que puedes caer, equivocarte, fallar e incluso fracasar… pero no puedes permitir que tus propios pensamientos y tus decisiones te hagan sentir que eres un fracasado, te hagan creer que eres eso que te sucedió y que no tienes la capacidad para hacerlo mejor e incluso tener una segunda oportunidad.
Debemos aprender que no hay nada peor que sentir lástima por nosotros mismos, eso es una ofensa, al gran trabajo que hizo El Padre Celestial, porque le estamos diciendo: «ves lo que tu creaste de mí no funciona, no es perfecto, no sirve».
Cuando somos quienes no reconocemos la perfección de ÉL reflejada en nosotros, sobre todo cuando: a pesar de poder tener libre albedrío, decidimos revolcarnos en el dolor y el sufrimiento, cuando a pesar de tener el poder de solucionar los problemas vivimos quejándonos más que buscando la solución, cuando nos repetimos una y otra vez: “no puedo”.
Por esta razón tenemos un deber, para con nosotros mismos y ese es: el SER FELICES, esa es la mejor manera de agradecerle a nuestro Padre Celestial por todas las maravillosas capacidades de las cuales nos doto.
Para hacerlo solo debemos adaptarnos, agradecer, sonreír, imaginar, creer, soñar, crear, amar, ser feliz, reinventarte, no ver el problema sino buscar la solución, no lamentarte, sino agradecer la oportunidad de crecer con esta enseñanza, ver la oportunidad donde los demás ven un problema y si del cielo te caen limones, pedir tequila y sal.
Debes recordarte a diario que está permitido caer pero no quedarse en el suelo, que puedes cometer errores pero debes corregir tus acciones, que está permitido vivir tu dolor o duelo, pero no sin olvidar el hermoso regalo de vivir el presente y disfrutar de él.
Soy Milena, una peatón incansable de esta vida, creo en el amor incondicional y la locura como forma de vida.
Le temo a la soledad, me encantan las noches de luna llena y la música de Ricardo Arjona, Jordano y Mecano.
Sé, reconozco y estoy consciente de mis capacidades. Vivo feliz, alegre y agradecida con mi Dios. Soy de las que ve un vaso medio lleno y salgo a buscar más agua, de las que cree que si toca rodar por una pendiente, tú decides como bajarla, si ir dando tumbos tragando tierra o corriendo con una gran sonrisa. Madre, esposa, emprendedora, diseñador gráfico de título, escritora por hobbie y ser humanamente imperfecto, en búsqueda del tesoro que esconden las almas.
Pueden encontrarme a través de mi emprendimiento en @lenaspasandiego un Spa para tus manos y uñas.
Gracias por la oportunidad de poder llegar a los demás a través de mis vivencias, mis letras y particular forma de ver la vida.
Escrito por:
Milena Fandiño,
Instagram Lena Spa San Diego